Ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea acordaron en su cumbre del Consejo que aplicarán impuestos a las empresas de moda de “usar y tirar” para prevenir y gestionar de mejor manera los residuos de la industria textil, uno de los mayores contaminantes al medio ambiente en la actualidad.

La moda de “usar y tirar” posee una estrategia de precios bajos y grandes volúmenes que además de generar un consumo excesivo entre los ciudadanos es de las que más residuos genera en el mundo.

Con este gravamen, las empresas deberán pagar una contribución proporcional a la recogida, clasificación transporte y tratamiento residual de calzado y ropa, teniendo en cuenta otros factores como el impacto ambiental de producción y la durabilidad de los mismos.

Una de las afectadas será Shein, la empresa china con sede en Singapur, la cual realiza las ventas a través de aplicaciones para celulares y páginas web, que ya se ha manifestado en contra de la propuesta francesa de cobrar un impuesto a la marca a partir de 5 euros por artículo.  

Con este nuevo acuerdo se podrá obligar a las empresas del “usar y tirar” a realizar un proceso consciente de la reutilización y el reciclaje.

Según un informe de la ONG Ellen MacArthur Foundationmás del 80 por ciento de los textiles que son desechados se incineran y sus restos acaban contaminando el medio ambiente.