Más de 100 Robos de Arte Sacro Registrados en Hidalgo desde 1992
Por:
Guadalupe Ibarra
01 de abril de 2024, a las 11:24
Imagen de GATOPARDO
En un período que abarca desde 1992 hasta 2023, el estado de Hidalgo ha sido escenario de un total de 107 robos de arte sacro, según datos recopilados. Este tipo de crímenes ha afectado principalmente pinturas de caballete, esculturas policromadas, documentos y objetos sagrados, representando una preocupación constante para las autoridades y la comunidad religiosa.
Historia de los Robos
El primer incidente de robo de arte sacro en Hidalgo tuvo lugar en el municipio de San Salvador. Sin embargo, uno de los momentos más críticos fue registrado en el mismo municipio, en la comunidad de San Miguel Acambay, durante el año en que se sustrajeron cuatro pinturas de caballete, así como algunas esculturas de arcángeles y la figura del Santo Patrono, esta última adornada con incrustaciones de oro y plata.
En otras regiones de Hidalgo, como la zona Otomí-Tepehua en Metepec, se reportaron casos de despojo de cuatro pinturas de caballete y dos esculturas. En Acaxochitlán, se registró la sustracción de un documento, tres pinturas de caballete y dos esculturas policromadas.
Significado del Arte Sacro
El arte sacro comprende las producciones artísticas destinadas a rendir culto a lo sagrado o divino, tales como pinturas, esculturas y objetos ornamentales presentes en inmuebles religiosos. Según expertos, estas obras no solo son parte del patrimonio de la iglesia, sino también del patrimonio cultural de la nación.
Respuesta y Prevención
Ante esta situación, la comunidad religiosa y las autoridades han tomado medidas para proteger el patrimonio artístico y cultural de Hidalgo. El apoyo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha sido fundamental en la protección y mantenimiento de estas obras, aunque aún persisten desafíos.
Se han implementado medidas de seguridad, como la instalación de cámaras de videovigilancia y la colaboración activa de la comunidad en la vigilancia de los templos. Además, se hace un llamado a la concienciación y aprecio por estas obras de arte, así como a la denuncia y colaboración ciudadana para prevenir futuros robos.
Reflexión y Llamado a la Protección
El robo de arte sacro no solo representa una pérdida económica, sino también una afectación al valor litúrgico y cultural de estas obras. Por tanto, se hace un llamado a la comunidad a conocer y valorar el patrimonio artístico presente en sus parroquias, así como a protegerlo y preservarlo para las generaciones futuras.
Monseñor Domingo Díaz Martínez, arzobispo de la Arquidiócesis de Tulancingo, insta a los feligreses a proteger la riqueza presente en los templos, reconociendo que los responsables de estos robos son individuos con conocimiento del arte sacro, que operan con fines de lucro en el mercado negro. La colaboración comunitaria y la prevención son clave en la protección de este invaluable legado cultural y religioso.
Con Información de El Sol de Hidalgo