La falta de reconocimiento en el precio del producto y el aumento de los costos de insumo pudieran constituir las causas principales por las que más de 10 mil productores de leche en el estado de Hidalgo han abandonado su actividad en los últimos seis años.

Según comentó Álvaro González Muñoz, presidente del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche en la entidad, uno de los factores que han llevado a esta crisis es alza del precio para la compra de Liconsa, pues actualmente apenas cubre el costo de producción ya que alcanzó valores de 11,50 pesos el litro. Tizayuca, Tulancingo, Actopan e Ixmiquilpan, que son reconocidos por su vocación lechera, han sido los más afectados.

Una crisis que comenzó con la pandemia y que se extiende hasta hoy, muestra que el sindicato de productores de leche no se ha logrado recuperar, sumado también a la ausencia de políticas coherentes del titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural federal.​

Los propios datos de esta Secretaría muestran resultados que se consideran “notablemente bajas” por los conocedores del tema, pues el número de vacas lecheras disminuyó de 205 mil a 200 mil, con un promedio de producción diaria de 5 litros y medio por vaca. Estas cifras resultan preocupantes ya que el mínimo viable para garantizar la subsistencia de los productores sería 10 litros diarios.

González Muñoz recalcó sobre la necesidad de crear políticas más efectivas para elevar la producción del líquido y reconocer los costos de producción para evitar que aumente el número de productores que abandonan esta actividad.